Primeros auxilios a tu tobillo
El esguince o torcedura de tobillo es una de las lesiones más comunes en la práctica deportiva y en la vida diaria. Las prisas, la mala forma física, anteriores esguinces no tratados, el mal equipamiento o el mal estado de las superficies son unos ejemplos de la multitud de causas. Es necesario saber qué hacer para ayudar a tu tobillo.
Me encuentro con muchos pacientes que llegan a la consulta con un esguince y al preguntar por qué no aplicaron hielo, un vendaje o acudieron al médico me responden que no sabían qué hacer. Así que voy a intentar explicar lo que para mí sería un buen comienzo para un esguince, tratamientos de fisioterapia a parte, que nos ayudará a rebajar las consecuencias del esguince y nos rebajará el tiempo de recuperación.
Un esguince es la elongación de los elementos capsulo-ligamentosos de una articulación. Los ligamentos son flexibles pero tienen un límite pequeño, que cuando se supera rompe, en mayor o menor número, fibras de colágeno que provocan la clínica. Un esguince típico cursa con dolor, inflamación e impotencia funcional. También pueden existir lesiones asociadas que hay que descartar: lesiones tendinosas, lesiones óseas (edemas óseos, fisuras o incluso fracturas) o lesiones vasculares o nerviosas importantes (menos frecuentes).
¿Qué hacer cuando se produce un esguince?
Lo primero: calma y cautela. Cuando se produce un esguince es importante no entrar en pánico y mantener la calma. Hay esguinces con una clínica exagerada, con chasquido articular (que asusta), edema inmediato y abundante y con una impotencia funcional absoluta (ni rozar el suelo pueden) y no nos sirve de nada el nerviosismo que nos impida empezar a tratar el pie desde el minuto uno. Eso sí, no seamos osados y sí cautos, ya que existen esguinces sin chasquido, sin apenas dolor ni inflamación y que parece que nos deja seguir con la actividad y lo que podemos tener son lesiones asociadas o tener los ligamentos dañados y al no tener dolor intentar seguir y provocarnos otro esguince de mayor importancia.
Por eso calma, cautela y tratamiento CRICER.
¿Qué es el CRICER?
CRIoterapia, Compresión, Elevación y Reposo
Crioterapia: la aplicación de hielo es importantísimo en estos primeros momentos (como en el resto de tratamiento). La aplicación de una bolsa de hielo picado, bolsas de gel frio o los famosos pulpos se deben de hacer el mayor número de veces posible y elmáximo tiempo posible teniendo en cuenta lo siguiente: entre colocación de hielo y la siguiente debe de recuperar la piel el color, la temperatura y sensibilidad normal y el tiempo en el que estamos con el hielo va en función de las sensaciones del paciente. Cuando empieza a ser molesto o doloroso debemos de quitarlo rápidamente (las quemaduras por frío no son raras).
Compresión: los cuatro componentes de CRICER son efectivos, pero si hay alguno con dificultad para su uso es la compresión o el vendaje. Muchas veces un vendaje hecho por una persona sin muchos conocimientos entorpece los beneficios del frio por la cantidad o el tipo de venda y porque hay que hacerlo muy bien para que el efecto de contención sea efectivo. Si no tienes alguien con los conocimientos necesarios para hacerte un vendaje bien colocado y lo suficientemente fino para que notes el frio, en mi opinión, es mejor no hacerlo. En una balanza en la que se encuentre en
un extremo el vendaje de una persona sin conocimientos o el realizado en un centro médico de urgencias (que suelen ser aparatosos) y en el otro extremo los beneficios del hielo me quedo, sin dudarlo un momento, con el frio. Un cosa más, si te vendan y al cabo de unas horas tienes un dolor tremendo, dedos amoratados e hinchados o no sientes alguna zona del pie QUITA INMEDIATAMENTE EL VENDAJE sea quien sea quien te lo realice.
Elevación: importante mantener el máximo tiempo posible el pie en alto para evitar la inflamación
Reposo: otra cuestión controvertida. Hay fisios y médicos decantados por la opción del reposo absoluto (muletas, inmovilización severa, etc.) durante las 24-48 primeras horas y hay otros que se les pide movimiento y cargar enseguida. Ni tanto, ni tan calvo. Para mí lo mejor es utilizar el tobillo sin dolor. Por lo tanto, si te duele al apoyar tienes que usar muletas y no cargar; si te duele al caminar, utiliza las muletas pero vete apoyando; y si no te duele al caminar y solo determinadas acciones, evítalas. Eso sí, intenta no forzar. Entre más descansado este el tobillo en estas 24-48 horas mucho mejor, pero eso no significa que no puedas moverte y utilizarlo dentro de sus posibilidades, o sea, sin dolor de ningún tipo.
En resumen, mucho hielo, si te puede vendar un fisio sería perfecto (sino no nos perjudicaría mucho), pierna en alto y descansa el tobillo.
¿Voy al médico, a urgencias, espero al médico de cabecera?
¡Qué gran pregunta! En mi opinión, lo mejor sin duda es ir a un fisioterapeuta. Por varias razones: muchos esguinces no necesitan de un control radiológico, ni de una férula y, en alguna ocasión, ni tratamiento antiinflamatorio prescrito, por lo tanto, ir al médico sería perder el tiempo (eso no quiere decir que sea malo hacerlo). Otra razón es que los fisioterapeutas tenemos conocimientos de sobra para diferenciar entre un simple esguince de tobillo y un esguince de tobillo con algunas complicaciones. Si las hubiera o hubiera una ligerísima duda os mandaría al médico para que descarten posibles problemas asociados (que no son tan raros como pueda parecer) porque ningún fisio medianamente inteligente y responsable trataría un tobillo con una pequeña duda de que puedas tener una fisura en peroné o escafoides, un edema óseo o fisura de astrágalo o una rotura de tendón.
En este caso también hay que pedir cierto raciocinio, que muchas veces se pierde con el nerviosísimo y la falta de cautela. Si tienes una inflamación abundante, con un dolor impresionante y además, tienes una deformidad en el tobillo que no sabes si es la inflamación u otra cosa, vete al médico sin dudarlo porque puede ser mucho más que un esguince y si descartan cualquier complicación mejor que mejor.
Por eso insisto, cuando te hagas un esguince, calma y cautela. Sea leve o importante, para de hacer la actividad, frio, eleva la pierna y descansa (si te hacen un vendaje fenomenal). Coge el teléfono y llama a tu fisioterapeuta de confianza, explícale lo que ha pasado y lo que sientes y te podrá aconsejar. Si no puedes o no tienes contacto con un fisio acude a tu médico que te diagnosticará y hará alguna cosa que cuando acudas a tu fisio (lo antes posible) tendrá que corregir (todo fisio que lea esto sabrá que son legendarios los vendajes de "crepé" que le plantan al alguno.
Con estos consejos se evitan muchos dias de baja, de sesiones con el fisio y de recuperación ante un esguince de tobillo leve, moderado o importante.